jueves, 24 de junio de 2010

Todo lo que queda
































































Menos que nada.



San Juan

San Juan es la noche más corta. Debería serlo. Esta noche debería ser la más corta. Tal como lo escucháis. Me pongo los zapatos e intento salir a la calle. Ayer no había salida. Si salida. Era la verdadera noche, la noche de todos los días, casi todos, casi todos, que pasé a su lado. De noche siempre todos los días. Días oscuros. Noches largas y frías. Mi mente está repleta de imágenes antiguas, de sonidos antiguos, de olores antiguos. Mis ojos son incapaces de volver a aprender. Mis orejas son incapaces de oír. Mi olfato es incapaz de oler. Mi piel. MI PIEL, sabéis, es incapaz de sentir nada. He perdido lo viejo y todavía no he conquistado lo nuevo. Las noche más corta. La noche más corta. San Juan. Salgo a la calle. La luz de las explosiones no ilumina la noche más larga, la noche más larga de mi corazón.

lunes, 14 de junio de 2010

La pradera

Se extendía ante mis ojos. La pradera. Podía verla. La pradera. Mañana húmeda ante mis ojos. Mañana. Los horrores de la noche se habían disipado. De la noche. De la noche. El día era peor. Lo peor era afrontar el día. El día. No había pradera. No había nada delante. Sólo el día. Sólo. Lo sabéis cada mañana al levantaros. Estáis solos. Estaréis solos. El día. Mejor que no amaneciera. Mejor la noche con horrores incluidos. Sin pradera.

sábado, 12 de junio de 2010

Gustos con mal sabor

No me gustan los embaucadores. No me gustan los mentirosos. No me gustan los falsos. No me gustan los hipócritas. No me gustan los que gritan. No me gustan los que ponen mala cara. No me gustan los crueles. No me gustan los desconsiderados. No me gustan los soberbios. Pero tú me gustabas. Tengo un problema.

domingo, 6 de junio de 2010

Ir al cine

Delante del espejo veo una película de la que soy protagonista. No me reconozco. No. No logró reconocer quién era cuando estaba contigo. Tampoco quién soy ahora. No sé si alguien podría. ¿Alguien puede?¿Alguien puede decirme quién era? Nadie responde. Tú menos que nadie. Puedo olvidar este rostro que no necesita nadie. Podéis olvidarlo. Tendré que inventar un nuevo rostro, no para ti, un rostro para poder mirarme al espejo. Algún día os lo enseñaré.

jueves, 3 de junio de 2010

Buenas noches

Se acabaron las buenas noches hace tiempo. Se acabaron los buenos días hace tiempo. Tiempo. Hace tiempo. Me queda la noche y el día, más buenas desde que no te doy las buenas noches en la cama ni los buenos días por la mañana. Ahora veo que nunca fueron buenas. Se puede ver.

Me entusiasmé demasiado pronto

En algún momento perdiste todo el interés. Nada te interesaba. Nada. Lo que menos yo. No tenías ganas de hacer nada conmigo. No tenía ganas. Creo que se puede entender. Deberíais poder entenderlo. ¿A qué se debió esa falta de entusiasmo? ¿Soy culpable de algo? Seguramente, de no haber dado por terminada la relación cuando debía hacerlo. De nuevo, sí, me repito, debía hacerlo, debía hacerlo antes, antes. Antes de que me contagiaras la falta de entusiasmo. Un apático es triste. Dos apáticos no tiene palabras. Somos cobardes, es la verdad. Si, sabéis que es la verdad. No estar sola, la obsesión de no estar solos. Aunque ya no quede nada de pasión ni de ilusión. Ilusos. Ilusa.